—La realidad se ve mejor en una pantalla, parece más real, dijo Alex con la mirada perdida mientras sostenía en la mano un porro grueso del que se desprendía un saumerio fuerte; ella lo miraba un poco de acuerdo, un poco inconsciente, no recordaba ya de qué hablaban, así eran las trabas de Andrea, la hierba la levantaba muy arriba de sí misma y empezaba a surfear la situación siempre con cara de distraída, siempre sin rumbo.
—Sí te entiendo, no necesito de la pantalla, sin embargo dijo ella en voz ausente, me pasa que las mejores cosas son las que aún no me han pasado, la promesa de esa cosa que está por pasar; tomó el porro le dio una calada y dijo, las tetas sienten desde antes el mordisco que están por recibir, mi sexo se moja desde el beso intuyendo que más tarde será su turno, el polvo es antes del polvo, el beso antes del beso, la carne antes de la carne… el sabor de la carne, me refiero, la hamburguesa ya ha llegado a mí desde el momento en que el mesero la trae a la mesa y ese momento ya es todo… sabés, yo creo que los mejores besos los he dado yo antes de dar el beso, porque estoy segura que a los demás también les pasa, en esa ilusión egoísta que da la anticipación, pero la gente olvida que también el otro hizo parte de esa fantasía, que si la paja estuvo riquísima y el sexo soñado fue el mejor sexo del mundo, entonces eso fue real también, eso pasó.
Alex extendió la mano y tomó el porro con una pinza, Andrea tenía la mala costumbre de babearlo y él odiaba eso aunque en otros espacios le encantaba, por eso no la recriminaba, coincidía con ella en que lo mejor que hacemos está en los momentos previos, y si quería seguir disfrutando de su boca y sus besos llenos de saliva, en sus mamadas húmedas, debía guardar silencio.
—Es el mismo principio, dijo después de la calada, verlo en una pantalla significa que ya pasó, pero desde una perspectiva distante, es como las fotos, claro no siempre fueron pantallas las fotos, vos no lo recordás, sos joven, para vos los portarretratos son marcos para cuadros e ilustraciones, pero no siempre las fotos fueron pantallas, la cosa es esa, lo ves desde lejos, vos lo ves antes, yo después, el mundo ya pasó, ya existió y es incambiable, y eso de alguna manera lo hace hermoso, no es lo mismo verte las tetas, que querer vértelas y mucho menos tener el recuerdo a la mano siempre de que te las vi, no es lo mismo el deseo, que la acción ni que el recuerdo, y menos que la prueba del recuerdo, a vos te gusta soñar con lo que podría ser, a otros solo les gusta ser y a mí, a los nostálgicos, y más a los marihuaneros nostálgicos como yo, nos encanta recordar simplemente lo que ya fue, porque vos sos feliz con el futuro, mientras que yo creo que uno siempre vuelve a esos lugares donde amó la vida; dijo mientras se le acercaba mucho para apagar el porro en la caneca que había detrás de ella, es de Borges dijo.
—¿Cómo?, preguntó ella distraída como siempre que estaba high y nerviosa de imaginar ese beso que sabía que vendría, de esa caricia que prometía que ser una cadena de contactos, y la humedad la sonrojaba porque para ella lo mejor del sexo estaba pasando desde ya y ahora que él sabía cómo lo vivía ella, no podía contenerse y perseguía la idea de sus besos, de su cuerpo, del sonido de sus cuerpos chocando… del sabor.
—Que al final la realidad es lo de menos, vos estás viviéndolo desde antes de que pase y yo estoy esperando a que se termine para disfrutarlo. —Dijo y al fin la besó.