Vicio

El niño nuevo no deja de llorar, dice, justificándose que todo lo que hizo fue porque quería otra vida, diferente, no es tan grave dice, si alguien lo supiera, si el juez y el jurado hubiera escuchado a su mamá gemir cada noche para subsistir, si hubiera visto los hombres que la golpeaban, si hubieran entendido lo humillado que me sentía cada noche, si tan solo hubieran vivido mi vida, me perdonarían.

El jurado no perdona a nadie niño, lo han visto todo, escuchado todo, no a tu madre, bueno quizá sí, quizá a la tuya sí, pero ellos no necesitan escuchar gemir a tu madre, ellos han escuchado a otros cientos que como tú nunca escucharon a su madre gemir, no busque simpatías inexistentes, tu vida fue dura, y no estuviste a la altura. Al jurado, nada más importa. Sos culpable, siempre lo ha sido las decisiones las tomaste vos, manipulado o no, vos decidiste y entre más rápido la aceptés mejor.

Yo tenía 17 años cuando mi suerte se jugó, era nuevo en un colegio católico, así que si algo sabía es que había depravados. Siempre los hay entre los curas, lo contagian como una epidemia, es divertido que les digan curas, son realmente infección, una enfermedad, solapados.

Éramos 8, teníamos quince, éramos niños, yo aunque me veas aquí, aunque me digan dealer, estoy aquí por amor y no por droga, tenía todo lo que vos querés niño pobre, tenía la plata, los carros, el poder, mi abuela era gobernador, pero no me bastaba, no lo quería, no era importante, sé que te jode, para mí ser no bastaba y vos querías tener lo que yo era, pero te aseguro que no vale el precio que estás pagando, tampoco lo hace el turo, yo quería a una mujer experta en hacerme sentir deseado, quería una puta gimiente, a una loca alborotada, yo quería todo eso que tu mamá fingía ser y la verdad me bastaba.

Cada fin de semana juntábamos los algos, e inventábamos trabajos extracurriculares cada viernes, el primo de Cris era door man, nos dejaba entrar por 15 lucas, ver cucas, depiladitas y no tanto, verlas cambiarse, era un show especial, tonto, vago, como nosotros, era un show que se compartía con el último juego de supernintendo, los últimos tenis o tablas, no teníamos para culiar, a duras penas pagamos por ver nos inventamos los putiaderos pay per view pero nada de regalías, dije sonriendo, en fin, yo renuncié a todo, mi familia tenía nombre, podía hacer a cualquiera mi perra, pero domesticar una era interesante, lamentablemente me mordió, me sembró una hectárea de droga en la pieza que vivíamos y ese tombo que ella decía que era gay, llegó a registrarnos el cuarto el único día de la semana que estaba solo.

Me entendés las mujeres como tu mamá, solo quieren una cosa, verde, un vil metal, pero vos soñá con una mujer buena, no hay tantas por cierto, soñala y sobretodo merecela, porque ellas las otras, las de pegaito a la paré, no valen la pena aunque cobren el intento.

El niño lloraba, su madre, el único día que lo dejaba solo, un exnovio policía llegaba para requisarla, ni una llamada, ni un visaje, me entendés las mujeres como tu mamá te siembran, s{i es normal que estés aquí, sabes qué, yo la quería, pero ella solo quería mi billete, fue duro, 35 años me metieron… me gasté la herencia en hierba pa vender y ella en 30 millones de mierda convirtió mi entrega, nunca importé.

Así que deja de llorar, porque a ese negro, a Germán, le encantán lo llorones de 1.50 cm.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s